Actualmente se habla de la alergia como la epidemia del siglo XXI, tanto es así que en el 2025 se prevee que casi el 50% de la población tenga algún tipo de alergia. Usted o algún familiar cercano seguro que entrarán en esa estadística futura. Mi pasión por mi trabajo me ha llevado a crear este blog, con el que me lanzo a la autopista de las redes sociales con el fin de aportar mi experiencia y conocimientos para que la persona alérgica sea capaz de asumir su enfermedad, comprenderla y convivir con ella de la forma más natural y equilibrada posible. El reto es grande pero la ilusión es mayor.

19 de marzo de 2013

ALERGIA Y ANTICONCEPCIÓN:

 

 

En mi época de aprendiz de Medicina se estudiaba Anatomía empezando por la Embriología, es decir, la formación de un nuevo ser humano. Aún guardo el libro, bastante amarillento, "Embriología Médica, Langman, cuarta edición". Al abrirlo, el primer párrafo dice: "El desarrollo de un individuo comienza con la fecundación, fenómeno por el cual el espermatozoide del varón y el ovocito de la mujer se unen para dar origen a un nuevo organismo, el cigoto". El cigoto es el conjunto de células que formará un embrión desarrollándose hasta convertirse en un nuevo ser .
 
Permitidme un repaso sobre la historia de la fecundación humana desde el punto de vista de la Antropología, una ciencia que nos ayuda a comprender los aspectos biológicos de la persona y su comportamiento como miembro de una sociedad. Y es que, para que os hagáis una idea de como evoluciona la ciencia,  hasta hace un siglo los espermatozoides eran considerados los "animalillos seminales".
 
Los humanos siempre nos hemos preguntado por el origen de la vida y el desarrollo de la misma. Las limitaciones tecnológicas iniciales contribuyeron a las respuestas imaginarias en las diferentes culturas, donde la magia y las creencias adquirieron un papel decisivo.  Esto lo podemos observar actualmente en algunos pueblos primitivos donde la ignorancia entre la relación copulación-fecundación es uno de los rasgos más llamativos que todavía podemos encontrar. Para ellos las relaciones sexuales abren el camino para que un espíritu deposite el germen, ya que el hombre se considera muy insignificante para crear con un simple acto sexual todas las transformaciones que tienen lugar en el cuerpo femenino, y que van desde el embarazo al nacimiento y posterior lactáncia de un nuevo ser vivo.
 
Un estudiante de Medicina holandés observó por primera vez los espermatozoides humanos en 1677. Fueron llamados "animalillos seminales" y considerados como la fuente misma de la vida al contener seres humanos en miniatura. Frente a ellos estaban los que creían que dicha función formadora del ser humano estaba en el huevo procedente de los ovarios femeninos. Dos posturas encontradas hasta principios del siglo XIX donde se confirmó que para que existiese la fecundación era necesario un contacto directo entre el espermatozoide y el huevo (óvulo).  A pesar de este paso importante, aún se consideraba que el espermatozoide se encargaba de dar  forma a  unos determinados órganos y el óvulo a otros. Por fín, en 1865 se desterró la teoría de que los espermatozoides eran animalillos independientes y se demostró que eran verdaderas células. Un año más tarde también se confirmó la naturaleza celular del óvulo y así quedó establecida definitivamente la teoría de la fecundación celular presente hasta nuestros días.
 
 
 
La historia de la anticoncepción se asocia con el origen del control de la natalidad y para ello tenemos que remontarnos al descubrimiento por parte de nuestros antepasados de la asociación entre la práctica de relaciones sexuales y la posibilidad de embarazo en las mujeres fértiles.
El deseo de controlar la reproducción estaba ligado históricamente a encontrar el momento más favorable para tener descendencia dependiendo de circunstáncias sociales y económicas. Este hecho sumado a la práctica del matrimonio por amor en el siglo XVIII, donde no contaba sólo la necesidad de descendencia, originó la generalización de los métodos anticonceptivos.
En el siglo XX la preocupación ante un embarazo no deseado y el acceso a diferentes métodos anticonceptivos consolidó la separaración real de la actividad sexual y la reproducción.
En España hasta finales de 1978, el Código Penal en su artículo 416 condenaba la venta y publicidad de cualquier método anticonceptivo.
Durante los últimos años el desarrollo y la difusión de estos métodos ha sido muy importante y han permitido un amplio abanico de opciones con una alta eficacia anticonceptiva sin implicar un gran coste económico.  
 
En este mundo de la anticoncepción también aparecen problemas derivados de reacciones alérgicas secundarias a su utilización, os describo las que podéis encontrar con mayor frecuencia:
 
1. MÉTODOS DE BARRERA: Eficacia media-alta. Son los más utilizados. 
  • Preservativo masculino o condón: En la antigüedad estaban hechos de membranas de animales (intestino y vejiga) y se utilizaban para prevenir el contagio de enfermedades como la sífilis. En el siglo XIX aparecieron los de caucho y desde el siglo XX son de látex. Para su utilización se le añaden diversos productos químicos (tiuran, carbamatos, parafenilendiamina, pigmentos, etc) que son los responsables del desarrollo de dermatitis de contacto alérgicas retardadas o tipo IV. El látex desarrolla más frecuentemente reacciones de hipersensibilidad tipo I, mediadas por IgE, que pueden ser graves; y es el principal responsable de reacciones alérgicas en el uso de preservativos. Actualmente existen preservativos de poliuretano sin látex para los alérgicos.
  • Preservativo femeninono aparece hasta 1993, es de poliuretano por lo que no suele originar problemas de alergia. Es desechable e inodoro y está diseñado para ajustarse al perfil natural de las paredes vaginales. Pese a todas sus ventajas no ha sido muy bien acogido y su uso es escaso.  
  • Diafragma y capuchón cervical: el diafragma es una caperuza de látex o silicona que se coloca en el cuello del útero impidiendo el paso de los espermatozoides. Es reutilizable a diferencia del capuchón que es de un sólo uso. Es conveniente utilizarlo con espermicidas para una protección adicional.  
  • Espermicidas: muy utilizados en la antigüedad, se conoce el uso de excremento de cocodrilo, aceite de cedro, vinagre, ungüento de plomo, mezcla de incienso con aceite de olivo, supositorios de quinina o cacao. Actualmente su base son sustancias químicas que actúan contra los espermatozoides disminuyendo su movilidad. Se presentan en forma de supositorios, geles, cremas o aerosoles. Los más utilizados son:  N-9 (nonoxinol-9) y los derivados sulfídicos. El uso frecuente de N-9 se ha asociado a irritaciones vaginales de carácter no alérgico pero que pueden originar úlceras en la zona vaginal. Los derivados sulfídicos son compuestos principales en el aceite de ajo, por este motivo las personas con alergia al ajo (muy infrecuente) los deberían de evitar.
El látex es un potente productor de reacciones alérgicas tanto en hombres como en mujeres. Las reacciones alérgicas al látex se pueden manifestar de forma inmediata o retardada. Las inmediatas o tipo I pueden producir desde urticaria, asma, rinitis, conjuntivitis hasta cuadros severos de anafilaxia. Las reacciones retardadas o tipo IV se manifiestan en la piel con dermatitis y eczemas de contacto. Siempre que sospeche una alergia de este tipo debe acudir al especialista para su diagnóstico y tratamiento. El diagnóstico se realiza con el test cutáneo a látex de forma directa para descartar alergia tipo I, las de tipo IV se detectan mediante las pruebas de contacto con el parche. Una vez diagnosticada la alergia el único tratamiento es evitar el contacto con látex y llevar medicación pautada para casos de contactos inadvertidos. Los preservativos "hipoalergénicos" no están indicados para los alérgicos al látex  ya que contienen pequeñas cantidades de este producto y es importante recordar que en las reacciones alérgicas no influye la cantidad. 

En la actualidad existen preservativos sin látex, fabricados con poliuretano, de igual eficacia y calidad y que hasta el momento no han ocasionado problemas de reacciones alérgicas. 
 
Dos puntualizaciones importantes:
     Preservativos con diferentes sabores: hay que hacer una llamada de atención para que las personas con alergia a alimentos tengan especial cuidado en su uso dependiendo de su alergia; por ejemplo: preservativos de sabor a fresa, plátano, chocolate, etc.
     - Preservativos con "efecto retardante para él y estimulante para ella": estos preservativos llevan asociado un lubricante  que contiene un 5% de benzocaina, un anestésico local que reduce la sensibilidad del glande y retrasa la eyaculación en el hombre. Este anestésico es muy utilizado y se ha asociado con frecuentes problemas de reacciones alérgicas de contacto en la piel (picor, eczemas, urticarias). Su diagnóstico es fácil mediante las pruebas del parche en la piel. Si se confirma la alergia a la benzocaina debe de evitarse el uso de este tipo de preservativos.
Al mismo tiempo, su superficie presenta múltiples puntos y estrías con el objetivo de aumentar y acelerar la estimulación de la mujer.
 
La página de internet http://www.condonsimon.com/ ofrece una amplia información sobre los diferentes tipos de preservativos, su composición y alternativas posibles para las personas con problemas de alergia.
 
 
 
2. MÉTODOS HORMONALES: Su eficacia es muy alta.
La píldora fue descubierta en 1956 y en 1960 se permitió su venta como anticonceptivo en EEUU. Su uso transformó la vida sexual de las mujeres y se consideró como uno de los avances más significativos en anticoncepción . En España fue legalizada en octubre de 1978. Actualmente millones de mujeres la utilizan en todo el mundo.
Existen diferentes formas de administración hormonal:
  • Píldora combinada de diferentes hormonas
  • Píldora de gestágeno
  • Anillo vaginal
  • Parche cutáneo
  • Anticonceptivo hormonal inyectable
  • Implante subdérmico

A pesar de que los anticonceptivos hormonales no suelen producir problemas de alergia, en ocasiones se han asociado con las siguientes alteraciones inmunológicas:
- Angioedema hereditario relacionado con estrógenos: infrecuente, los síntomas comienzan a los 7-14 días tras el inicio del tratamiento hormonal. Se manifiesta con hinchazón subcutáneo o a nivel de mucosas en diferentes partes del cuerpo, sin picor, sin dolor y sin urticaria (ronchas). El diagnóstico es clínico, es decir, los síntomas aparecen siempre relacionados con el tratamiento con estrógenos. La única solución es evitar los anticonceptivos con esta hormona.
- Dermatitis autoinmune por progesterona: muy infrecuente. Los síntomas de alergia son variados (urticaria, eczemas, anafilaxia) y aparecen durante la fase previa a la menstruación que es cuando el nivel de progesterona es más alto. La historia clínica es muy importante para el diagnóstico, el cual se confirma mediante la prueba cutánea con progesterona. En estas mujeres hay que tener especial cuidado en el caso de los anticonceptivos hormonales ya que suelen contener progesterona.
- Las reacciones alérgicas por contacto con el parche cutáneo de estrógenos la dermatitis de contacto alérgica aparece después de semanas, meses o incluso años desde el inicio de forma continuada del tratamiento. Hasta un 20% de las mujeres que utilizan estos parches presentan eritema e irritación en el lugar de la aplicación, que causa la interrupción del tratamiento en un 8% de las pacientes. El clima cálido y húmedo acentúa los síntomas. Las zonas del cuerpo que originan reacciones con más frecuencia son la espalda y el abdomen. Lo más seguro es aplicarlos en las nalgas alternándolos. El médico tendrá que determinar si la alergia está producida por la hormona o por el resto de componentes del parche (el adhesivo, el alcohol o el liberador).

 
 

 3. DISPOSITIVO INTRAUTERINO: Eficacia alta-muy alta. Existen dos tipos diferentes:
  • DIU hormonal (progesterona)
  • DIU de cobre
El DIU es un objeto pequeño formado por plástico generalmente en forma de T; unos llevan cobre y otros un pequeño depósito hormonal. Se coloca dentro del útero y actúa dificultando la progresión de los espermatozoides.
Desde la antigüedad se conocía el efecto anticonceptivo derivado de la colocación de un cuerpo extraño en el interior del útero de algunos animales. Pero hasta principios del siglo XX no se descubrió la anticoncepción uterina moderna.  
A pesar del amplio uso del DIU de cobre las manifestaciones alérgicas asociadas son escasas y leves, generalmente localizadas en la piel como urticaria y/o dermatitis de contacto. No deben ser utilizados con mujeres que presentan alergia al cobre.
El DIU hormonal puede producir el mismo tipo de alteraciones alérgicas que los anticonceptivos hormonales explicados anteriormente.

 
 
 
4. MÉTODOS QUIRÚRGICOS
Son definitivos y su eficacia es muy alta.
En la mujer es el bloqueo de trompas y en el hombre la vasectomía.
Los problemas alérgicos que podemos encontrar son los secundarios derivados de las reacciones adversas a los medicamentos utilizados como los anestésicos o los antiinflamatorios-analgésicos.
Hay que recordar que los alérgicos al látex tienen que ser intervenidos en quirófanos libres de látex en su totalidad.
 
La elección de un método anticonceptivo ha de ser adecuada a las necesidades y exigencias de cada persona en particular y, en caso de sospecha de reacción alérgica siempre se debe de consultar con un especialista para su diagnóstico y prevención.


El uso de la anticoncepción desde la antigüedad nos demuestra que la sociedad, independientemente de su punto de vista, ha comprendido la necesidad de utilizar estas técnicas. Gracias a  su evolución, influida por las costumbres y las creencias,  hoy contamos con anticonceptivos eficaces, inocuos y económicos.